Lentejas turcas
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Se caracteriza por no poseer su piel externa, lo que la hace de fácil digestión comparada con una lenteja común. Posee un destacado aporte en proteínas y fibras. También aporta variedad de vitaminas y minerales como el hierro y ácido fólico para prevención de anemias. No es necesario remojar. Para su cocción se requieren 3 partes de agua por 1 de lenteja en un tiempo que varía entre 3 y 5 minutos.

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